Hace unos días y ayer mismo hemos podido leer y escuchar las
manifestaciones del Consejero de Educación y del Secretario
General de su Consejería haciendo públicos sus reparos a la
reivindicación del profesorado de la enseñanza pública que
reclama la prórroga del sistema de jubilación voluntaria
anticipada del profesorado.
STECyL deplora las manifestaciones del Consejero de
Educación y del Secretario General de la Consejería. Les
pide que, dado que parece ser que no apoyan esta
reivindicación unánime y razonada del profesorado de nuestra
región, no pongan más piedras en el camino y se dediquen a
resolver los problemas que sí son de su competencia y a
cumplir los acuerdos que tienen suscritos con los sindicatos
docentes de la enseñanza pública y que reiteradamente vienen
incumpliendo desde el curso pasado.
Es posible que ni el Consejero ni el Secretario General de
su consejería quieran acogerse a este sistema voluntario.
Tal vez no lo necesiten. No es el caso del profesorado de la
Educación Infantil, Primaria y Secundaria.
Durante
los últimos 10 años (2000/2009) un total de 5.633
profesores/as – 4.322 maestros/as y 1.331 de los cuerpos de
secundaria- de los Centros Públicos de Castilla y León se
han jubilado anticipadamente acogiéndose al actual sistema
de Jubilación voluntaria anticipada del profesorado de los
Centros Públicos. Un sistema que, de no remediarse, puede
tener los días contados ya que la LOE únicamente ha
prorrogado este derecho básico del profesorado hasta el
2011. Tras casi veinte años de ejercer este derecho,
consideramos que debe consolidarse, ya que somos conscientes
de que esta medida supone una ventaja para todo el sistema
educativo. Contribuirá además al reconocimiento social e
institucional del trabajo docente y a que se efectúe el
recambio generacional que requiere el sistema educativo,
originando más empleo en el sector.
La
Administración no puede ignorar la demanda unánime del
profesorado de prorrogar indefinidamente la jubilación
anticipada, así como la implementación de otras medidas para
los mayores de 55 años. El profesorado, día a día en las
aulas y durante muchos años, se ha esforzado por responder a
las crecientes exigencias de la profesión docente, por lo
que acaba tras esos años de trabajo en las aulas
verdaderamente cansado. Defendemos la necesidad de la
jubilación voluntaria anticipada como condición ineludible
de apoyo al profesorado: las exigencias sociales respecto a
la docencia aumentan día a día, requiriendo adaptaciones
permanentes a cambios continuos, con cargas emocionales y
psicológicas cada vez mayores que están dificultando en los
últimos tiempos el trabajo en los centros.
Permite
al profesorado que ya ha dedicado en la actualidad muchos
años de servicio a la sociedad, bastantes de ellos con más
de 35 años trabajados, tener el merecido derecho a jubilarse
y con ello, además, hacer posible la renovación y
rejuvenecimiento de las plantillas docentes, dando opción al
profesorado interino a acceder al cuerpo de funcionarios,
así como permitir un futuro más esperanzador a los y las
jóvenes que terminan la universidad. Tenemos un amplio
colectivo del profesorado mayor de 50 años en nuestra
Comunidad que podría acogerse a ella en breve. De no
permitírselo, tanto el sistema de acceso a la función
pública docente como el concurso de traslados se verían
colapsados. Además hay que señalar que este sistema de
jubilación anticipada ha permitido a la Consejería de
Educación incrementar moderadamente, y sin coste añadido,
los cupos de plantillas de los profesores en los centros, lo
que ha sido posible gracias al ahorro en retribuciones
derivado del elevado número de jubilaciones anticipadas del
profesorado.
Pedimos
a la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León
que si no apoya ante el MEC esta demanda, por lo menos no
nos tache de insolidarios. Al MEC le exigimos que inicie
negociaciones con los sindicatos de la enseñanza y que se
adopten con urgencia los cambios legislativos necesarios
para que el profesorado consolide este derecho a la
jubilación anticipada con 60 años.
Valladolid
a 10 de marzo de 2010.
Secretaría de Comunicación de STECyL-i