La
Confederación Intersindical exige una
ley del aborto que respete la libertad
de las mujeres a decidir sobre su
maternidad
Las
recientes detenciones de personal
sanitario de determinados centros
hospitalarios por casos de prácticas de
abortos “supuestamente” ilegales están
reflejando la insuficiencia de la
legislación española en relación con el
derecho de las mujeres a decidir sobre
su maternidad. Han sido suspendidas
varias clínicas en Madrid y Barcelona
por presuntas irregularidades, el
personal de los centros ha recibido
amenazas de muerte y agresiones en la
calle, se difunden mentiras e
informaciones, falsas y sin pruebas, de
horrores truculentos que hablan de
gritos y llantos de bebés cuando están
siendo asesinados, restos humanos en
bolsas de basuras, trituradoras que
deshacían los restos, en fin, qué
horror, cuántas mentiras, cuántas
falacias. Volvemos a las situaciones que
vivimos hace más de veinte años cuando
muchas mujeres exigíamos el aborto libre
y la derecha ultraconservadora, grupos
antiabortistas, provida, etc., nos
acusaban de promover el asesinato de los
no nacidos, aduciendo los argumentos más
espurios y denunciando hechos que -qué
casualidad- eran los mismos que están
utilizando ahora como si fueran nuevos
(ya en aquel momento hablaban de que se
tiraba los restos de no nacidos a los
contenedores de basura y difundían
cintas de video de bebés que lloraban
cuando se les asesinaba al extraerlos
por la fuerza del útero materno, etc.).
Tenemos
una Ley del aborto de hace 22 años y, a
juzgar por lo que está ocurriendo, está
caduca, obsoleta y, además, es bastante
más restrictiva que los países de
nuestro entorno, como Alemania, Austria,
Bélgica, Dinamarca, Francia, Portugal,
Grecia, Bulgaria, Eslovaquia, Estonia,
Letonia, Lituania, Hungría o la
Republica Checa, que admiten el aborto
libre – sin supuestos legales- hasta las
12 semanas de gestación. En el caso de
España, la Ley fija tres supuestos para
permitir el aborto: riesgo para la salud
de la embarazada, detección de grave
tara física y psíquica para el feto y
cuando el embarazo es consecuencia de
una violación. Lo ocurrido en Madrid y
Barcelona evidencia que la Ley en vigor
no da respuesta al derecho de las
mujeres a decidir sobre su maternidad.
Después
de todo lo ocurrido, de las mentiras
atroces y la persecución a la que se ha
sometido a las clínicas afectadas, al
personal de estos centros y a las
mujeres que han abortado, era de esperar
que el gobierno diera una respuesta y
que saliera, al menos, a desdecir toda
esta sarta de mentiras, pero no, no han
tenido valor. No sólo no se han atrevido
a valorar los hechos, sino que un día
dicen que hay que reformar la Ley y al
día siguiente se desdicen. El Partido
socialista y, lo más preocupante, las
mujeres del Partido Socialista, además
de otros de quienes ya lo esperamos de
antemano, han permitido que en una
votación a una moción de IU que incluía
la reforma de la Ley con una Ley de
plazos, fuera rechazada por abrumadora
mayoría, ni más ni menos que 21 votos a
favor y 277 en contra. Es evidente y
claro: el Partido Socialista está
preocupado por el desgaste que les ha
supuesto el enfrentamiento con la
Iglesia católica por la Educación para
la ciudadanía, por la enseñanza
privada-concertada y el falso discurso
del derecho de los padres/madres a
decidir la educación de sus hijos.
Ahora, en pleno periodo electoral, el
partido socialista no quiere una nueva
campaña de desgaste que le puede llegar
de la Iglesia católica por una supuesta
reforma de la ley del aborto.
Desde
la Organización de Mujeres de la
Confederación Intersindical y STES-i,
queremos insistir en la necesidad de
modificar esta Ley del aborto.
Necesitamos una Ley moderna y
definitiva, que no deje resquicios
legales que puedan impedir a las mujeres
el ejercicio libre, en la sanidad
pública y con todas las garantías
sanitarias y jurídicas, de su decisión
voluntaria de interrumpir un embarazo.
Además de todo ello, es necesario
promover, desde el ámbito de la
educación, la educación afectivo-sexual,
para prevenir embarazos no deseados
entre las jóvenes, además de campañas
informativas y formativas dirigidas a la
prevención de embarazos no deseados y el
acceso libre a la anticoncepción.
Isabel
González López
Responsable de la Organización de
Mujeres
Confederación Intersindical, 18-12-07 |